Desde hace meses el equipo técnico del Museo Carmen Funes, dirigido por Adrián Garrido le esta dando vida entre otros dinosaurios a un gran depredador, el Aucasaurus garridoi. Esta es la primera réplica de este dinosaurio, el cual fue hallado en fines de la década de los '90 por el Geólogo Alberto Garrido en la zona de Auca Mahuida, sitio famoso por sus nidadas de dinosaurios saurópodos titanosaurios. Se cree que Aucasaurus pudo haberse aprovechado no solo de estas crías al nacer, sino, incluso de sus progenitores. Este es un dinosaurio del grupo de los abelisaurios, como lo es el conocido Carnotaurus sastrei y el propio Abelisaurus comahuensis. Resulta interesante y a la ves impresionante ver darle forma a este antiguo y feroz habitante de Patagonia.
domingo, 29 de junio de 2008
martes, 24 de junio de 2008
Hallazgo de Megaraptor en Australia
Imagen realizada por HodariNundu
Recientemente, científicos australianos han publicado los resultados sobre un fósil de un tipo de dinosaurio que hasta ahora sólo había sido hallado en la Patagonia, Argentina. Los expertos determinaron que un hueso del antebrazo encontrado en una cueva del estado australiano de Victoria tiene una serie de características comunes con un dinosaurio argentino conocido como Megaraptor, una especie carnívora que llegaba a medir siete metros. El paleontólogo australiano Steve Salisbury indicó que es la primera vez que se encuentra en Australia un resto fósil de un dinosaurio con afinidades "incuestionables" con animales de otros continentes del hemisferio sur. A pesar de que los científicos creen que durante gran parte de la época en la que vivieron los dinosaurios, Australia formó parte del gran continente de Gondwana, que incluía además a la Antártida, Nueva Zelanda y América del Sur, hasta ahora no había encontrado fósiles que aportaran peso a esa versión. Según la Universidad de Queensland, el paleontólogo del Museo de Ciencias Naturales de Argentina Federico Agnolin corroboró que el hueso encontrado tiene una enorme similitud con Megaraptor. Hasta el momento los fósiles de este dinosaurio se habían encontrado únicamente en la Provincia de Neuquen, Patagonia, en rocas al menos 15 millones de años más jóvenes que las del sur del estado australiano de Victoria. Los resultados de la investigación, financiada conjuntamente por la Universidad de Queensland, la Universidad de Chicago y el Museo de Historia Natural de Carnegie de Pittsburg, ha sido publicados en la revista científica de la Royal Society of London.

Recientemente, científicos australianos han publicado los resultados sobre un fósil de un tipo de dinosaurio que hasta ahora sólo había sido hallado en la Patagonia, Argentina. Los expertos determinaron que un hueso del antebrazo encontrado en una cueva del estado australiano de Victoria tiene una serie de características comunes con un dinosaurio argentino conocido como Megaraptor, una especie carnívora que llegaba a medir siete metros. El paleontólogo australiano Steve Salisbury indicó que es la primera vez que se encuentra en Australia un resto fósil de un dinosaurio con afinidades "incuestionables" con animales de otros continentes del hemisferio sur. A pesar de que los científicos creen que durante gran parte de la época en la que vivieron los dinosaurios, Australia formó parte del gran continente de Gondwana, que incluía además a la Antártida, Nueva Zelanda y América del Sur, hasta ahora no había encontrado fósiles que aportaran peso a esa versión. Según la Universidad de Queensland, el paleontólogo del Museo de Ciencias Naturales de Argentina Federico Agnolin corroboró que el hueso encontrado tiene una enorme similitud con Megaraptor. Hasta el momento los fósiles de este dinosaurio se habían encontrado únicamente en la Provincia de Neuquen, Patagonia, en rocas al menos 15 millones de años más jóvenes que las del sur del estado australiano de Victoria. Los resultados de la investigación, financiada conjuntamente por la Universidad de Queensland, la Universidad de Chicago y el Museo de Historia Natural de Carnegie de Pittsburg, ha sido publicados en la revista científica de la Royal Society of London.
sábado, 21 de junio de 2008
Gastrolitos in situ en un ejemplar de Gasparinisaura

El paleontólogo Argentino Ignacio Cerda de la Universidad de Comahue, acaba de publicar recientemente en Acta Paleontológica Polonica, la descripción de una acumulación de gastrolitos conservados "in situ", es decir en el interior de una carcasa fósil del pequeño ornitópodo Gasparinisaura sincosaltensis. La litofagia, comportamiento definido como la ingesta deliberada de rocas, es un hábito registrado en numerosos grupos de vertebrados, tanto actuales como extinguidos. En grupos fósiles, la única forma de determinar un hábito litófago es a partir de la presencia de rocas asociadas íntimamente a los restos óseos. Estas rocas son comúnmente denominadas gastrolitos. En dinosaurios no avianos, se ha reportado la presencia de gastrolitos en un gran número de taxones, aunque en la gran mayoría de los casos la evidencia no es concluyente. Hasta el momento, los únicos registros indiscutibles de gastrolitos en dinosaurios se limitaban a algunas especies de saurisquios no avianos y sólo un genero de ornitisquios, el ceratopsio basal Psittacosaurus. En el trabajo de Ignacio Cerda se describe el primer hallazgo de gastrolitos en dinosaurios ornitópodos, siendo además el segundo registro para dinosaurios ornitisquios. En este caso, la especie portadora de gastrolitos fue Gasparinisaura cincosaltensis, un ornitópodo basal de tamaño reducido del cual se han descubierto alrededor de una docena de ejemplares. Los materiales provienen de la localidad de Cinco Saltos, situada en la región norte de la Patagonia Argentina.Estratigraficamente, los restos proceden de la Formación Anacleto, correspondientes al Campaniano temprano. En el mencionado estudio, las acumulaciones rocosas asociadas a tres ejemplares de Gasparinisaura son interpretadas como auténticos gastrolitos. Dicha afirmación es sustentada por numerosas evidencias. En primer lugar, las rocas no se encontraban de forma esparcida, sino formando acumulaciones. Tales acumulaciones se conservaron además en lo que alguna vez correspondió a la región abdominal de los especimenes. Por otro lado, los tres ejemplares se encontraban articulados al momento de su extracción, siendo dos de ellos los especimenes más completos y mejor preservados de los que se tiene conocimiento para Gasparinisaura. Finalmente, el hecho de que las acumulaciones de rocas aparecieron no en uno, sino en tres ejemplares distintos de la misma especie, es otro de los factores determinantes a la hora de inferir que las rocas se corresponden efectivamente con gastrolitos.La aparición de gastrolitos en Gasparinisaura permite reconocer un tipo particular de comportamiento (litofagia) en un organismo extinguido, algo relativamente poco común en paleontología. No obstante, este hallazgo genera nuevos interrogantes tales como: ¿Cuál era la función de los gastrolitos en Gasparinisaura?, ¿Estaba dicha función relacionada, como sucede actualmente en aves, al procesamiento mecánico del alimento?, de ser así, ¿Era poco eficiente el aparato masticatorio de Gasparinisaura en comparación a los demás ornitópodos, y por ello eran necesarios los gastrolitos?. Futuras investigaciones enfocadas en especies litófagas actuales y extinguidas aportaran nuevas evidencias que permitan resolver estos y otros interrogantes.
viernes, 6 de junio de 2008
Los materiales de Loma de los Jotes estan siendo preparados
